miércoles, 4 de septiembre de 2013



Respira. Serás madre toda tu vida.
Enséñale las cosas importantes. Las de verdad.
A saltar en los charcos, a observar a los bichitos,
a dar besos de mariposa y abrazos muy fuertes.
No olvides esos abrazos y no se los niegues nunca:
puede que dentro de unos años los abrazos que añores
sean los que no le diste.
Dile cuánto le quieres siempre que lo pienses.
Déjale imaginar. Imagina con él.
Déjale llorar. Llora con él.
Las paredes se pueden volver a pintar.
Los objetos se rompen y se reemplazan 
continuamente.
Los gritos de mamá duelen para siempre.
Puedes fregar los platos más tarde.
Mientras tú limpias él crece.
Él no necesita tantos juguetes.
Trabaja menos y quiere más.
Y, sobre todo, respira.
Serás madre toda tu vida.

Él sólo será niño una vez.

miércoles, 29 de mayo de 2013

MuJEreS



Mañana es un día especial. Asistiré a un evento solidario a favor de las mujeres desfavorecidas de Guatemala. Una gran apuesta para tratar de mejorar este mundo que habitamos.
Tengo ganas de ver mi foto en la exposición, y una frase grabada en mi vientre lleno de vida.
¿Dónde estará mi hada?...
Mucha suerte, Ana, y gracias por hacerme partícipe de tus sueños.

jueves, 18 de abril de 2013




"Entonces, Almitra hablo otra vez:

¿Qué nos diréis sobre el Matrimonio, Maestro?

Y ésta fue su respuesta:

 Nacisteis juntos y juntos permaneceréis para siempre.
 Estaréis juntos cuando las blancas alas de la muerte
 esparzan vuestros días.

 Y también en la memoria silenciosa de Dios estaréis
 juntos.

 Pero dejad que los vientos del cielo libren sus
 danzas entre vosotros.

 Amaos con devoción, pero no hagáis del amor
 una atadura;

Haced del amor un mar móvil entre las orillas
 de vuestras almas.

 Llenaos uno al otro vuestras copas, pero no
 bebáis de una misma copa.

 Compartid vuestro pan, pero no comáis del
 mismo trozo.

 Cantad y bailad juntos y estad alegres, pero que
 cada uno de vosotros sea independiente.

 Las cuerdas de un laúd están separadas aunque
 vibren con la misma música.

 Dad vuestro corazón, pero no para que vuestro
 compañero se adueñe de él.

 Porque sólo la mano de la Vida puede
 contener los corazones.

 Y permaneced juntos, pero no demasiado juntos.
 Porque los pilares sostienen el templo, pero están
 separados.

 Y ni el roble crece bajo la sombra del ciprés ni el
 ciprés bajo la del roble."




                                                                                              Gibran Jalil Gibran

domingo, 17 de marzo de 2013

jueves, 7 de marzo de 2013

Teatralia

Este mes podemos disfrutar aquí en Madrid de los diversos espectáculos que conforman Teatralia. El pasado sábado nos hemos ido de excursión con la peque a Valdemorillo, para asistir a una ópera para bebés titulada "La caverna sonora", de la compañía La Casa Incierta. Fue sorprendente ver cómo bebés (enanitos todos) prestaban atención, abriendo al máximo todos sus sentidos, al espectáculo preparado para ellos. Os lo recomiendo, además por un precio asequible.


jueves, 28 de febrero de 2013

Marionetas o monicreques

¿Tenéis por ahí algún calcetín viejo, desparejado? ¡Pues no lo tiréis!, ni se os ocurra. Podéis hacer una estupenda marioneta a vuestro pequeño. Tan solo hace falta echarle algo de imaginación y tener a mano lana para el pelo, botones para los ojos, algo fieltro para la boca, y cualquier otro pequeño material que se os ocurra para adornarla. Lo ideal es usar calcetines divertidos, de colores, con rayas, topos, ... Ya puestos podemos montar un teatrillo con una caja familiar de cereales. ¡Yo ya estoy montando la mía!


jueves, 17 de enero de 2013

Una biblioteca que crece con su hijo


Ningún experto lo duda: el contacto con los libros es primordial desde la cuna. La lectura estimula el desarrollo de los niños, la imaginación, la creatividad, es una forma de afecto, les ayuda a conocer y entender el mundo que les rodea... Los libros son una forma privilegiada de atender a todas sus necesidades. Por eso, se aconseja a los padres que, desde que nacen, generen en sus hijos la sensación de que la lectura se produce en un ambiente bienestar.

Los libros ayudan en el conocimiento, pero no hay que olvidar que también ofrecen un contenido lúdico, es una forma de divertirse, de soñar, de imaginar, de reír... Y para cada edad, y para cada niño, hay libros acordes a su desarrollo. Que sean grandes lectores dependerá en gran parte de los padres. Ellos deben conocer cuáles son los intereses y necesidades de sus hijos; dar ejemplo en casa; leer a los pequeños incluso cuando solo balbucean; llevarles a librerías, bibliotecas; acompañarles en la elección del libro (buscando información en internet o aceptado los consejos del librero), conversar con los niños sobre los libros y nunca convertir la lectura en un castigo.

Tres expertas ofrecen consejos para saber cuáles son los libros más adecuados según la edad: Eliana Maridueña, de la editorial Juventud; Isabel Carril, directora de publicaciones generales de la editorial Bruño y Elsa Aguiar, responsable de contenidos de literatura infantil y juvenil de la editorial SM.

De 0 a 3 años
Cuanto antes mejor, aconsejan los expertos. Desde que nacen, los bebés pueden familiarizarse con los libros. «No focalizan la mirada, ni siquiera pueden sostenerlos, pero pueden entender su musicalidad y la poesía de las canciones», asegura Elsa Aguiar, responsable de contenidos de literatura infantil y juvenil de la Editorial SM. «Lo más importante es generar en el niño la sensación de que la lectura se produce en un ambiente de bienestar, relajado, íntimo y amoroso. Que es algo agradable. Por eso, es importante mirarle a los ojos cuando le leamos», añade.

Y la oferta para esta etapa tan temprana es amplísima. Eso sí, son libros que siempre deben garantizar su seguridad. «Que no contengan piezas pequeñas, ni materiales tóxicos», advierte Isabel Carril, directora de publicaciones de la editorial Bruño. «De cartón y con las puntas redondeadas, que pesen poco para que puedan cogerlos con sus manitas», explica Eliana Maridueña, del departamento de Comunicación de la Editorial Juventud. Es una forma de favorecer su psicomotricidad.

Desde libros de plástico para el baño, mordedores, hasta otros que contienen diferentes texturas, sonidos, de grandes imágenes, con colores vivos que contrasten para que puedan distinguir mejor...

Deben ser libros que ayuden a despertar los sentidos y que favorezcan su desarrollo evolutivo, sobre todo psicomotriz y socioemocional... El libro se convierte en un juego más, en un elemento natural que forma parte de su entorno.

A partir del año funcionan ya determinados personajes, sobre todo animales que permiten a los bebés desarrollar afecto ya que se apegan a ellos. Libros con solapa y ya con palabras que el niño asocia a una imagen. Es una forma de comenzar a desarrollar vocabulario para cuando a los dos años explote el lenguaje.

A partir de los dos años ya se juega con las palabras, el niño comienza a hablar. Es entonces cuando los niños empiezan a identificar objetos, aprenden formas, incluso emociones básicas (triste, enfadado, alegre), rutinas de su día a día (levantarse, ir al cole, comer, irse a dormir, cepillarse los dientes), los primeros números, el abecedario, las estaciones, los colores... «Todo para empezar a controlar el mundo en el que viven. Son libros que el adulto puede leer, escenificar y ayudar al niño a entenderlo», asegura Elsa Aguiar. A partir de ahora se pueden empezar a contar los primeros clásicos adaptados.

De 3 a 6 años
Además de seguir desarrollando todas las capacidades anteriores, en esta etapa se produce un giro fundamental. El lenguaje, su vocabulario, crece por momentos, pero también «es la etapa de iniciación a la lectura, lo que llamamos la prelectura. Y no hay prisa, pero es fundamental enriquecer su vocabulario, que el niño entienda el mensaje de los libros, con frases sencillas. Para eso se puede apoyar en otros elementos como ilustraciones», asegura Isabel Carril.

A esta edad, los pequeños entienden los libros con una historia y con imágenes, pueden seguir los dibujos acordes con lo que se les está contando. Les encanta ver libros tridimensionales, imaginativos y también de la vida cotidiana, se puede empezar a introducir en valores, en la inteligencia emocional... Disfrutan con libros participativos, de juegos o creativos así como los que tienen canciones, adivinanzas y rimas fáciles. Empiezan a captar los primeros conceptos básicos.

Hay que seguir trabajando los hábitos pero ahora se puede hacer de forma diferente: un cuento para el niño que le cuesta coger el sueño, o que no quiere ir al cole, o que se le escapa el pipí por la noche. También se pueden empezar tratar los miedos: a la oscuridad, a los monstruos...

Hay que empezar a estimular la fantasía. «La imaginación tiene que estar presente siempre, porque los niños hasta que no son mayores no distinguen demasiado entre realidad y fantasía. Hay que desarrollar eso y vacunarles para que no pierdan la capacidad de crear y soñar con otros mundo», recomienda Elsa Aguiar.

Saciar su curiosidad es otro de los objetivos en esta etapa: dar respuestas a sus preguntas; de dónde viene la leche o el yogur, o por qué cambian de color los semáforos.

Y nunca hay que olvidar el humor, como apunta Eliana Maridueña, que les gusta mucho.

«Hay muchas vías de entrada en la lectura, se trata de crear lectores y el camino es distinto para cada niño», dice Elsa Aguiar.

De 6 a 8 años
Ya son lectores, pueden seguir libros cortos con argumento, donde siga predominando la imagen, de lenguaje y frases sencillos, con palabras nuevas que puedan comprender fácilmente en el contexto y con episodios o capítulos que cierran la historia. Pero ojo, mucho cuidado en esta transición que debe hacerse de forma suave. «Quizá todavía se les hace cuesta arriba leer un libro entero. Hay que tener mucho cuidado a la hora de abandonar de repente el hábito de leerles porque ellos ya saben hacerlo a los seis años. Tienen que recibir su dosis de literatura con el adulto y poco a poco irles soltando la mano, como cuando aprenden a caminar», advierte Elsa Aguiar.

Es la edad de la fantasía, de la imaginación, comienzan a soñar, a experimentar, a sentir miedos... Por eso les gusta todo tipo de cuentos. Las temáticas son variadísimas: les encantan las series de personajes que les generan cercanía, de personajes con los que se pueden identificar (la niña pequeña que es un trasto en el colegio y se ha peleado porque le han quitado las pinturas); los libros sorprendentes les llaman la atención (novelas policíacas para pequeños, donde se investigan casos con enigmas, juegos...), los libros de animales, princesas y piratas, seguir cultivando los valores (la recompensa, la perseverancia, la solidaridad, la honestidad)... Introducirles ciertas situaciones de la realidad: papá no tiene trabajo, la muerte...

De 8 a 12 años
Ya leen más, las lecturas son más extensas y complicadas. Las imágenes dejan de ser un complemento para facilitar la comprensión y los relatos crecen en intensidad. Aún así el libro tiene que ser atractivo y con tipografía clara. «Los niños empiezan a ser más críticos y ya no creen todo lo que se les dice. Pero el mundo de la fantasía va a existir. Es ahora cuando el niño se va definiendo por sus gustos. Para saber qué libro le puede ir bien, lo mejor es preguntar ¿qué es lo último que le ha gustado?», dice Isabel Carril.

Su interés por la realidad continúa que se mezcla con la fantasía, tienen un extraño sentido del humor, les gustan las aventuras de pandillas, las aventuras, los héroes, la ciencia ficción, el misterio y las narraciones detectivescas, los personajes con los que se identifique...

De 12 a 14 años
Son capaces de disfrutar de historias complejas, de libros con más de cien páginas. Sin embargo, conviene que las frases no sean demasiado largas ni complejas y que prime la acción sobre la descripción. Las ilustraciones casi desaparecen, permitiendo espacio a la imaginación. Comprenden casi todas las palabras y situaciones.

Funciona el bestseller, porque «los adolescentes son muy gregarios. Haber leído determinados libros es una forma de pertenencia al grupo», dice Elsa Aguiar.

Se bifurcan entre la fantasía pero también les interesan libros que conecten con su realidad y lo que están viviendo (drogas, amor, sexo, inmigración, convivencia en las aulas). Se inician en lo romántico. Es buen momento para comenzar con adaptaciones de los clásicos de la literatura, empiezan el interés por lo romántico. Les gusta las aventuras, los viajes, las novelas de detectives de espionaje de terror, fantásticas con contenido sobrenatural. Despierta el interés por biografías de figuras relevantes, por versiones de mitos, y leyendas.

Adolescentes
Los libros deben abordar temas sobre el ser y el sentir del adolescente, con los que se sienta identificados y traten aspectos que pueda interesarlos: preocupaciones sociales, emociones profesionales que ellos mismos se vean reflejados en esos personajes de ficción:

Novelas realistas de temas contemporáneos: ecología, terrorismo, racismo, enfermedades como la anorexia, bulimia, problemas de adicción, tribus urbanas, novelas de misterio, fantástica épica de ciencia ficción novelas y poemas de amor, comics...

(Sacado de un artículo del periódico ABC)

viernes, 4 de enero de 2013

Villancico original

Dicen que es el villancico del año. La verdad es que la mezcla U2/Silent Night no les ha quedado nada mal...